Espectacular el primer encuentro de octavos de final que abría la jornada en el Bilbao Arena. Ni Unicaja ni Canterbury acusaron el desgaste de las jornadas previas y demostraron un altísimo nivel. Lanzados al ataque, sin contemporizar, el equipo canario cogió las primeras diferencias buscando y encontrando a su pívot Diakite que resolvió bien cada balón que le llegó en la pintura. De esa manera establecieron el 7-14 del minuto 6. Reaccionó el equipo malagueño cerrando la conexión con el pívot de los canarios. Le dejaron de llegar balones y Luis Alberto López le dio un descanso. Aprovechó ese momento Unicaja para con triple incluido de Luis García establecer un parcial de 9-0 que les valía para llegar al final del primer cuarto con 18-19 en el luminoso.

No bajaron un ápice la intensidad ninguno de los dos equipos. El Canterbury seguía por delante en el luminoso porque Unicaja fallaba desde la larga distancia (21-25). Presionaban los malagueños y recuperaban balones pero no era suficiente. Buena lucha en la pintura y los canarios que se colocan en zona. Triple de Rosa que avisa de sus intenciones y para el descanso, 36-32.

Presión a toda pista de los isleños, también subía línea el Unicaja. Penetración de calidad de Veljovic para Canterbury, trillezo de José Luis Ibáñez en el otro aro, y en esas Diakite que volvía a pista para hacer daño y cargar con la tercera personal a Morgan Stilma. Poco después costa a costa de Jesús Carralero pero en el siguiente despiste contraataque de Veljovic que no aprovechó el adicional pero sí que sumaron de tres en 3 sus compañeros. Castillo y lo hizo por dos veces para el 55-48 a 12 minutos y medios del final. El tiempo muerto del técnico del Canterbury no se hizo esperar. Seguía de dulce Jesús Castillo con un nuevo triple mantenía en el +8 a los suyos y el otro Jesús, Carralero completaba el 61-50. De esta manera se abrió la defensa de Las Palmas de Gran Canaria y dejaron espacios para que Ignacio Rosa cortara por la zona y dejara la bandeja. Al final del tercer cuarto, 63-52.

Tendría que cambiar cosas el Canterbury si quería verse en cuarto de final. De momento presión individual en todo el campo. Los de Paco Aurioles no jugaron con la ventaja, mantuvieron la intensidad defensiva y en ataque siguieron siendo agresivos en la búsqueda del aro. Comenzaron a jugar con el crono dentro de los últimos 5 minutos y además dispusieron de muchas segundas opciones.

Pero el Canterbury no bajaría los brazos. Acción de 3+1 de Alejandro Hernández para meter presión a Unicaja (71-66 a 3 minutos y medio del final). Nadie se descolgaba ni abría brecha. El final ajustado estaba asegurado. El Canterbury volvía a solicitar la aportación de Diakite y éste respondió. Sólo le pudieron parar en falta y en los tiros libres estuvo certero 5/7 en este tramo decisivo. Con 73-72 falló Unicaja y la penúltima posesión era del Canterbury. La penetración de Santiago Aldama no quiso entrar, el rebote fue para Stilma y la falta sobre él fue instantánea. Con 6 segundos el alero de los Países Bajos anotó 1 de los 2 tiros libres. Dio tiempo a una acción dibujada en la pizarra, el balón le llegó a Diakite, sacó 2 tiros libres pero falló el primero y acertó con el segundo sin quererlo, 74-73 y sólo 52 décimas. La victoria era andaluza.