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EBG Málaga: 25 años de baloncesto en familia

La escuela de Los Guindos celebra sus bodas de plata en una temporada especial insistiendo en una educación deportiva a través de los valores humanos con niños de 3 a 21 años


[Fuente: CRISTINA PINTO - Diario SUR]

Al final todo se resume en eso, familia. La Escuela de Baloncesto Los Guindos (EBG Málaga) no lo entiende de otra forma. Nacieron en 1997 como promoción del Club Caja de Ronda y la base de la escuela ya la formaban alrededor de cien familias. Este año cumple 25 temporadas de trabajo por y para los valores a través del baloncesto y son unas 800 familias las que visitan las pistas cada semana. Aquellos comienzos de 1997 los vivió Ricardo Berrocal, ahora miembro de la junta directiva. Se le escapa un suspiro cuando recuerda esos inicios: «Las pistas de Los Guindos siempre habían estado abiertas al baloncesto de la ciudad, pero hacía falta un empuje para que funcionase. Y nos propusimos llenar las instalaciones de niños y niñas para que practicaran baloncesto, que todo el mundo pudiera hacer este deporte sin impedimentos», detalla.

Niños desde los 3 hasta los 21 años botan la pelota en las canchas de Los Guindos con el nombre de EBG Málaga por bandera. El presidente de la escuela sigue siendo el mismo desde que se creó, Nicolás García, aunque asegura que no hay ningún secreto. «Y si hay alguno es que aquí la presidencia no es como en un club cualquiera, aquí está el presidente porque es un nombre que tiene que haber. Pero la importancia está en las personas: en los jugadores, los niños, las familias y todos los que integran el club», resalta el presidente.

De esta gran cantera de EEG Málaga han salido jugadores como Berni Rodríguez, Alberto Díaz, Domas Banús, Tuti Sabonis o Francis Alonso, entre otros muchos más. Todo se resume en una cantera más del baloncesto malagueño. «Fundación Unicaja y Unicaja Baloncesto nos apoyan, nosotros preparamos a los mejores jugadores dentro de nuestro gran abanico y ellos los cogen para llevarlos a la élite», puntualiza Nicolás García. Pero claro, no todos esos niños llegan a lo más alto del baloncesto, de ahí a la importancia que EBG da a los valores. «Como dice un entrenador de la escuela: 'No todos van a llegar a ser jugadores profesionales, pero sí adultos», recuerda Ricardo Berrocal. «Por eso competir no es el máximo que buscamos nosotros, aunque sí que cada día luchamos por ser mejores. Pero intentamos transmitir que sean buenas personas, aquí estamos para formar en valores», reitera el directivo.

Labor social

Dentro de esos valores y líneas de acción que hace la escuela, por este 25 aniversario han querido darle un toque especial a la temporada. Todos los equipos del club han sido renombrados para este año para dar visibilidad a entidades sin ánimo de lucro que han tenido o tienen vínculo actualmente con EBG. «De esta forma reconocemos mejor su trabajo y serán mayores las cantidades de personas que se puedan acercar para cooperar o solicitar su apoyo», informan desde la escuela. Nombres como Fundación Otto del Nido, Fundación Loyola, Cáritas El Salvador, Multiser o Fundación Olivares son algunos de los que acompañan a estos equipos de básket.

«Tenemos un abuelo de 70 años que antes traía a su hijo de 11 años y ahora trae a su nieto. Esa es la mayor ilusión»

NICOLÁS GARCÍA, PRESIDENTE

«Como dice un entrenador: 'No todos van a llegar a ser jugadores profesionales, pero sí serán adultos'. Por eso transmitimos valores»

RICARDO BERROCAL, DIRECTIVO

Toda esta labor social hace que muchas de las familias continúen cada temporada llevando a sus hijos. «Somos una pequeña y gran familia», esta frase se repite una y otra vez cuando Nicolás García y Ricardo Berrocal hablan de la escuela de Los Guindos. «A mí lo que más me llena a título personal es que hayan pasado ya todos estos años y la filosofía del club se siga manteniendo, ese sabor añejo. Como cuando entras a sitios que tienen historia como San Estanislao o Maristas, que son colegios donde se respira deporte y valores; pues eso me pasa cuando entro a Los Guindos, que es un sitio que tiene historia. Y a mí esos sitios me gustan mucho», reflexiona Ricardo Berrocal.

Hay mucho baloncesto en sus pistas, pero, sin duda, de lo que más se habla en la escuela es a nivel personal. Cuando Nicolás García se pone a pensar en lo más especial de los 25 años, le viene este ejemplo a la mente: «Tenemos un abuelo con 70 años que traía a su hijo de 11 años y ahora trae a su nieto. Ese abuelo colaboró con la escuela hace muchos años y lo sigue haciendo de generación en generación, así tenemos varios. Eso es la mayor ilusión. Hay muchos momentos, pero, en realidad, con eso es lo que me quedo», concluye el presidente. EBGMálaga celebra su 25 cumpleaños con los mejores regalos de baloncesto y los valores humanos.

El equipo junior masculino, en uno de los campeonatos de España vividos en estos 25 años de la escuela. / SUR