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La selección Española Femenina clasificada para cuartos de final del Eurobasket 15

Serbia - España (80 - 91)


Ante una potente Serbia España sacó a relucir todas sus virtudes y, con un parcial de 7–18 en los últimos cinco minutos sentenció el pase a cuartos. Alba Torrens (25 puntos), Laura Nicholls (20) y Astou Ndour (15 y 12 rebotes) fueron tres de las destacadas en un equipo sublime que sobrevivió a una auténtica guerra de guerrillas. 

Espectacular partido, con una vibrante propuesta de baloncesto ofensivo por parte de dos selecciones que se lanzaron a por la victoria sin especular, amenazando la canasta contraria desde el primer segundo de posesión, atacando las defensas, tomando la iniciativa con el balón. Como resultado de esta valiente declaración de intenciones un primer cuarto con un altísimo tanteo de 27-24 favorable a las serbias que se beneficiaron un parcial de 9-0 cuando España dominaba por 8-14 en el minuto 5 tras un arranque con la sociedad Torrens-Ndour produciendo en cada ataque. Pero las balcánicas, con gran acierto exterior y alternando defensas tomaron la iniciativa, al final de primer cuarto y con un nuevo triple al inicio del segundo (30-24). 
 
Pero las nuestras disfrutaban de ese ritmo desinhibido, de esa fluidez a la hora de correr hacia pista contraria y fueron capaces de devolver el parcial, 0-9 y ponerse por delante gracias a un triple de Ana Cruz (30-33). Con Nuria Martínez dando mayor consistencia a la defensa, con Alba Torrens ejerciendo de estrella en la pista, España encadenó una serie de brillantes acciones tanto por el acierto ofensivo como por la eficacia defensiva que le llevaron a una ventaja 34-43 en el minuto 17. Las triangulaciones tras bloqueo y la capacidad de rebote en ataquey defensa determinaban la superioridad española que, sin embargo, no pudo acabar de plasmarla del todo en el marcador al descanso, pese a la ventaja de 40-46, tras un parcial en esta fase de 13-22.
 
Tras el descanso España salió con las mismas intenciones de correr y buscar ventajas desde el primer segundo de posesión pero ese 42-50 inicial encontró respuesta en el trío serbio formado por Petrovic, Milovanovic y Dabovic que tras un parcial de 12-4 empataron el partido a 54 en el minuto 28 para conseguir, in extremis, cerrar el tercer cuarto con mínima ventaja 62-61 tras los primeros y únicos minutos de falta de claridad de ideas en el ataque español. Pero… lo mejor, lo más extraordinario estaba por llegar en el desenlace.
 
Porque el último cuarto empezó con una sucesión de acciones por los dos lados, con Petrovic amenazando pero con Nicholls, extraordinaria, respondiendo, y con ella Ana Cruz, robo y canasta y tras ella una inconmensurable Ndour taponeando para inmediatamente provocar un dos más uno de Alba y, de pronto, la locura de un baloncesto maravilloso, con triple de Xargay, con acciones de NBA de Nicholls (20 puntos), con exhibición permanente de Alba (25 puntos)… con todo un equipo de baloncesto desbordando ambición y talento sobre el parquet, llevando el baloncesto femenino español no sólo a los cuartos de final sino a un nivel de espectáculo sencillamente fascinante. 

La Clave
 
España firmó unos cinco últimos minutos de ensueño gracias al talento individual y a la condición física excelente con la que están afrontando el campeonato todas las jugadoras. La capacidad defensiva de nuestras jugadoras en los momentos claves más la velocidad en las transiciones desbordaron a una potentísima Serbia.

El Detalle Técnico
 
Mondelo apostó por Xargay como “falsa cuatro” para emparejarla con Petrovic tanto para defenderla como para atacarla de cara. Esa posición de Marta abrió la pista en muchos momentos de la segunda parte permitiendo penetraciones de las exteriores o espacios para las interiores.

El Momento
 
Una serie de acciones encadenadas tras un robo de balón de Ana Cruz en el minuto 35 desencadenó un torrente de baloncesto en cinco minutos inolvidables en los que España firmó un parcial de 7-18.

Conclusión
 
Imposible sacar mejores conclusiones tras los partidos disputados y la capacidad de nuestras jugadoras para saber reaccionar ante las dificultades. España sabe combinar maravillosamente el juego colectivo con la capacidad individual para desbordar. Todas tienen claro cuál es su papel y lo llevan a cabo con una eficacia incomparable.

feb.es - Miguel Panadés